En el año de 1993, en El Salvador, la guerra había
sido superada. Todo se preparaba para crear por fin y de una vez por todas, el
referente de lucha electoral. El partido político “fmln”, se fundó amparado en
la convicción y el martirio de miles de muertos y desaparecidos. Pues desde el
genocidio de enero de 1932, se mantuvo una lucha social sin tregua y durante el
siglo XX, generaciones de campesinos, sindicalistas, obreros, estudiantes
universitarios etcétera, fueron triturados por la maquinaria de aniquilamiento
de los oligarcas y su ejército criminal. Algunos nombres de esos momentos
aciagos, ya nadie los recuerda; y para mencionar algunos como: Ismael
Hernández, Modesto Ramírez, Miguel Mármol, Víctor Manuel Ángulo, Luis Díaz...
Ismael Hernández a finales de la década de los
veinte (siglo XX) fue un sindicalista y ferviente dirigente del Partido
Comunista. De este luchador social existe una anécdota muy interesante que vale
la pena recordar. Cuenta la historia que durante la administración del
presidente Pío Romero Bosque (1927-1931), Hernández fue capturado por el
régimen, y durante su cautiverio fue torturado; en su celda donde lo mantenían
encadenado y durante el día los esbirros, le lanzaban agua fría. Por dicha
detención se encendieron los ánimos y hubieron protestas sociales, por su
liberación. Debido a la presión social, Pío Bosque envió a una comisión
especial, a pedirles a los salvajes generales, que permitieran llevar al
prisionero ante su presencia. Los carceleros lo llevaron ante la presencia del
presidente, envuelto en una capa de hule, dice la historia que Ismael
Hernández, temblaba por la fiebre y su cuerpo se había hinchado, producto de
los continuos baños de agua fría. El Presidente no escondió su asombro, por la
condición infrahumana en la que se encontraba el hombre. Entonces le dijo:
“…Usted es un inconsciente y un
bandido. Un hijo sin corazón y un irresponsable. ¿Cómo puede soportar usted que
su madre ande de cárcel en cárcel, tratando de salvarlo?, a usted le bastaría
renegar de esas ideas rebeldes y estúpidas para volver al seno de la sociedad.
Estamos dispuestos a darle esa oportunidad, si usted demuestra consecuente
arrepentimiento…”
“…Los inmorales, los crueles, los que producen tanto dolor en las familias del pueblo son ustedes. Yo sirvo a los intereses de los humildes, y por eso no me importa soportar estas pruebas. Yo soy un comunista que trata de ser consciente con su manera de pensar, como lo hacen los comunistas de todas las partes del mundo…”
Pío Romero Bosque, moderó sus palabras y le ofreció
dinero, para que se olvidara de sus ideas revolucionarias. Ismael Hernández se
negó a recibir un centavo y sólo pidió que le devolvieran las herramientas de
trabajo que le habían decomisado. Ese mismo día fue liberado.
Igual experiencia fue la que tuvo Agustín Farabundo Martí, frente a otro presidente. Cuenta la anécdota que Farabundo Martí fue capturado por el régimen del presidente Arturo Araujo (Gobernó nueve meses en 1931). Los carceleros le llevaron al revoltoso Farabundo Martí, amarrado como a un animal. Cuando lo tenía de frente, Araujo, alzando la voz le dijo:
“…Te pido que renuncies a tus ideas, yo
no tengo nada en tu contra y para que veas mi buena voluntad, te invito a que
te unas a la causa del Partido Laborista y para que nos vayamos entendiendo, te
ofrezco un buen cargo en el gobierno, el que vos querrás… ¿Qué te parece?..”
"…usted cree que los principios que forman la
conciencia de un revolucionario, pueden ser compradas con las mentiras del
maldito sistema del que usted, es un simple administrador. Yo estoy
suficientemente claro, para entender la distancia entre el compromiso real con
los pobres y los pequeños hombrecitos como usted, que se han convertido en
títeres de corrompidos intereses…”
Otro momento interesante, del espíritu de
convicción, de estos hombres fue el del comandante Marcial (Salvador Cayetano
Carpio). Quien estuvo capturado en las cárceles de la tortura durante el
régimen del presidente Oscar Osorio (1950-1956). Después de su experiencia en
la cárcel y volverse uno de los organizadores más importantes de la izquierda
radical, Marcial escribió un libro titulado “Secuestro y Capucha en un
país del mundo libre”. Un fragmento de su libro retoma su sentir
mientras se encontraba en las cárceles clandestinas, el cual dice:
No. No estamos ocultos olvidados. Los que están irremediablemente
perdidos, aislados, copados, son la pequeña camarilla de reaccionarios y sus
secuaces, sitiados por el océano del pueblo. No podrán escapar de la justicia
popular, ningún crimen podrán ocultar, aunque lo hayan cometido en las sombras
de la noche y bajo centenares de candados. No, ninguna celda nos retendrá
definitivamente, ningún secuestro valdrá; ineludiblemente nuestro pueblo nos
encontrará y nos liberará. Eso nadie lo podrá evitar: ¡Ni los Truman, ni los
Osorio! El pueblo, al final de los finales, vence, sobre los que quieren
detener su marcha ¡”
El comportamiento de estos hombres frente a esos
terribles tiempos, fue sorprendentemente valiente. Querían un cambio real y
murieron esperándolo.
“… Camaradas, nojotros los descalzos, tenemos
bien clarito que en este país hay que hacer cambios, para que los hambrientos
no sólo coman tortilla con sal y frijoles cuando hay…no hay duda que tenemos
que quitarles el poder a los ricos para que sean los pobres los que se
gobiernen; con eso le aseguro que los niños no se morirán de hambre o de
colerín. Cuando me corresponda hacerle de Alcalde de Juayúa, les doy mi palabra
a todos los presentes, que no me va a temblar el valor cuando me corresponda
devolver las tierras robadas a nuestros tatitas. Hemos soportado humillaciones
y robos injustificados de las tierras de donde sacábamos la comida para
nuestros hijos y que es la única herencia de amor de nuestros ancestros para
asegurar el futuro de nuestra sangre…”
Muchos saludos, mi amigo, mi camarada Sergio Flores.
ResponderEliminarAbrazo fraterno querido camarada
EliminarSergio eres para mi todo un referente en el cual busco siempre llenar mis dudas conociendo (de paso te dire soy el negro brito) tu obra logro mucho te admiro y respeto un chingo manito!! con tu permiso tomare todo esto y lo hare publico en mi fb sindical en el cual aparezco como Alberto Martinez mi hermano desde este terroncito de tierra que te vio nacer estas a la altura de estos que aqui nos cuentas yo te saludo con mucho aprecio
ResponderEliminarGracias camarada. Vos también sos parte de ese sueño de patria libre y linda que ha sido heredado de tiempo en tiempo. Abrazos y bendiciones
ResponderEliminarMuy interesantw. Felicitaciones Sergio
ResponderEliminarAbrazo fraterno querida Zully
Eliminares bueno su escrito sergio saludos y nos seguimos viendo en las redes.
ResponderEliminarSaludos fraternos Abuela Rana, Staff. Bendiciones amigo, seguiremos pendientes en redes sociales-
EliminarSaludos Sergio, es importante la conformación de una nueva izquierda, pero ya!
ResponderEliminarNo hay duda Daniel, que debe ser así.
Eliminar